Tal como es de costumbre, la Policía Federal realiza controles sorpresivos en distintos puntos de la ciudad de Río Grande. Este viernes no fue la excepción y llevaron adelante el mismo en la zona de la costanera.

En el operativo se pudo observar que los uniformados se encontraban acompañados de uno de los perros antidroga que posee esta dependencia. Este perro detectó que en uno de los vehículos había droga.

Esta “señal” que realizó el can, alertó a los policías quienes rápidamente se percataron que en el interior había una gran cantidad de cigarrillos de marihuana “porros” y envoltorios con cocaína, los cuales estaban listos para ser distribuidos en la noche riograndense.

Hasta el momento desde la Policia Federal y tampoco desde la Justicia han informado nada al respecto, dado al secreto de sumario que existe en torno a esta causa por droga. No se descartan allanamientos, ni tampoco otras medidas judiciales.