En Río Grande, la gestión municipal se ha visto obligada a reorganizar sus prioridades frente a la cancelación de obras nacionales. El intendente Martín Pérez señaló que varios proyectos que contaban con financiamiento nacional fueron suspendidos, lo que obligó al municipio a asumir algunos costos con recursos propios y replantear la planificación urbana. Según el intendente, “el Gobierno de Milei iba a respetar aquellas obras que estén con más de un 80% de ejecución, bueno, eso no sucedió, no respetaron ninguna de las obras por encima del 80%, dieron de baja absolutamente todo.”.

Entre las obras afectadas se encuentran el entubado del arroyo de la avenida Islas Malvinas y el Plan Procrear II, que contemplaba 180 viviendas. Estas obras no pudieron continuar debido a la falta de financiamiento nacional, lo que genera preocupación por la infraestructura y las necesidades habitacionales de los vecinos. En palabras del intendente, “son obras que, lamentablemente, no tenemos la capacidad económica para poder afrontarlas con recursos municipales."

A pesar de estas dificultades, el municipio continúa con proyectos financiados enteramente con fondos propios, como el Natatorio Olímpico, el Hogar de Día de Adultos Mayores y la Carpa de la Dignidad. Estas iniciativas reflejan el compromiso de la gestión con la comunidad y la necesidad de mantener los servicios e infraestructura esenciales.